El gobierno alemán, actualmente a cargo de Ángela Merkel, es una potencia económica y ahora ve la oportunidad para aumentar su poder político internacional, interviniendo en el conflicto del Estado Islámico, por medio del apoyo armamentista a los Kurdos.
La canciller se reunió de manera extraordinaria con la cámara baja del parlamento, y de manera unánime, hubo respaldo a la iniciativa de apoyar a los "valientes" Kurdos en un combate contra "la barbarie del terror del EI", según sus propias palabras.
En 2 semanas llegará una dotación cercana a los 70 millones de euros. Entre el armamento para el apoyo se encuentran misiles antitanques, lanzagranadas, fusiles de asalto, pistolas y granadas de mano, suficiente para armas a 400 peshmergas.
A la reunión asistió la canciller acompañada de algunos ministros del país, entre ellos Frank - Walter Steinmeier, quien señaló diversos riesgos que puede correr Alemania si arman a un grupo combatiente independiente, y aunque fue rechazada esta iniciativa por la izquierda, argumentado que "Irak necesita menos armas, no más", pero se replicó que es necesario para evitar le avance terrorista.
La iniciativa es rechazada por la mayoría de alemanes (60 a 80%), pero el gobierno continuará con ella, pues la finalidad es apoyada por Bagdad y se explica que solo se envían armas, pero que el ejército alemán no intervenirá en el conflicto directamente.
El pasado fin de semana, la Unión Europea señalaron el apoyo a los países que respalden la lucha contra el EI, pero se han lanzado fuertes críticas a Alemania, pues no es la primera vez que interviene en hechos como este (por ejemplo, contra Sadam Hussein). Y por otra parte, hay quienes defienden la injerencia alemana en el conflicto de Irak.